Rocio de Primavera...

Un día te fijas inevitablemente en sus Ojos, los miras, llenos de atención. Sin saber porqué, los has observado, y aunque no lo sepas, te han agradado más de lo que pensabas.Y si, por instantes, esa persona también te ha mirado...

Te das cuenta de que te gusta cuando al ver que te mira, te sonrojas tontamente, y al pasar, esbozas una tímida sonrisa. Una conversación de un minuto puede convertirse en los 60 segundos más intensos del mundo. Deseas que acabe, te ruborizas a más no poder..y cuando acaban, te vienen a la cabeza las mil cosas mejores que podrías haber dicho. Pero da igual, sientes cerca esos 60 segundos aún. Cuando empiezas a sentir, empiezas a evitar. Y aunque no lo sepas, evitas hablar, mirarte, cruzarte...por la simple razón de que te gusta. Sí, te  gusta... y ya no hay vuelta atrás, no te queda otra que reconocerlo. Y callarlo lo hace aún más emocionante.

Y aunque aún no sea amor, esa ilusión, esa atracción se convierte en la aventura mas motivante con el transcurso de los días. Quieres acercarte, que se rocen las manos por casualidad...

El juego de la seducción puede ser el mayor detonante de nuestras ilusiones, motivaciones y sensaciones. Buscar sus ojos, puede ser nuestro juego de felicidad, de complicidad.

La Querencia.

Embisteme, aquí te espero….rodeame,burlame,tengo la muleta  y el corazon abierto, bailame…mi capote sera el compás y mi cuerpo tu compañero.

Te miraré a los ojos cuando salgas, me confundirás, me atacarás…te marcaré a ritmo de capote y sentiré tu aliento. El polvo de la arena nos nublará. Me arrodillare ante ti, valientemente para ti,ven…

Creare una obra de arte, bailaré contigo hasta que los aplausos alcancen el limite del sonido. Hasta que los latidos de mi corazon abrumen el ruedo. Sé mi compañero de baile. Sabemos como acabará, pero bailemos.

A volapié si te paras, profundo y largo, pases de pecho entrelazados con el viento…y si me buscas, suerte del matador,y caerás. Si, caerás. Haré de tu osadía mi triunfo. Superaré tus embistes y me elevaran de orgullo.

Mi amor por ti es infinito, tanto que me jugaría la vida por bailar contigo cada tarde. Porque quiero torear a fuego lento, piano, al compás…Sentir tu ira, tu respiración, se mi compañero. Quiero abrazarte con mi arte. Sé mi compañero, mi aliado, la razón de mi sustento.  Siénteme a mi también, hagamos hoy algo bonito, no me guardes rencor, que a pesar de las cornadas yo siempre he seguido y seguiré aquí, solo por ti.

Llename de pasión, desbordemos de emoción y hagamos sentir todo nuestro alrededor.

Hace varias líneas que no se distingue si hablamos de una tarde en el ruedo o de una relación.No se cuando dejé de hablar de una y empecé a referirme a la otra. Todo constituye un vinculo, un sentimiento compartido, unas ganas de disfrutar,de sentir, de emocionar....De vivir.